Invadí su espacio como tantas otras veces lo habia hecho, pero ella, me empujó.
Por primera vez.
No es algo físico, pero duele.
Y me quedé desconcertada un tiempo.
El suficiente para ser consciente y aceptar el fin de un ciclo.
Lo hizo con amor, con delicadeza y firmeza, como se debe hacer cuando un ser querido se extralimita "bienintencionadamente", sin darse cuenta de la importancia o la transcendecia que ello tiene.
Cuando uno tiene hijos, durante un tiempo todo es una especia de pangea, donde nada delimita nada, y se superponen espacios y tiempos con la rutina y las costumbres. Todas las señales parecen indicar que nada cambia, que la vida es una sucesión de días similares... pero por supuesto que lo está haciendo, que va cambiando, aunque no se vea.
Exactamente como tiene que ser, al ritmo que impone la vida sus leyes.
Así que de un día de repente, allí estaba yo, utilizando mi rol de madre de niña pequeña, con una que ya no lo era tanto y llegó el momento necesario de dibujar terrirorios... ella señaló la parte de su vida que le pertenecía a ella no a mí, dibujó una linea, me abrazó y me recordo que me quería.
Reconozco que me sentí algo defraudada conmigo misma por no haberlo visto venir y después también reconfortada con la idea de que ella supiera hacerlo en mi lugar.
Seguramente saldré y entraré tantas veces como considere necesario en función de las circunstacias, me volveré a extralimitar queriendo o sin querer, hasta que compruebe que puede manejarse sola, pero fortaleceremos nuestra relación con la sinceridad y el cariño que da poner las cosas en su sitio, y aceptaré que el mío ya no es el epicentro...
Seguramente saldré y entraré tantas veces como considere necesario en función de las circunstacias, me volveré a extralimitar queriendo o sin querer, hasta que compruebe que puede manejarse sola, pero fortaleceremos nuestra relación con la sinceridad y el cariño que da poner las cosas en su sitio, y aceptaré que el mío ya no es el epicentro...
Quizás la que tenga que empezar a hacer más su vida, no sea ella... sino yo.